OFICIOS Y COMERCIO DE 1810
En la época colonial la gente compraba sus mercaderías en los comercios que por lo general estaban alrededor de la plazas como las tiendas, las panaderías y los almacenes.
También compraban alimentos que se producían en la zona y se vendían en el mercado de la plaza, al aire libre. Ocupaba un espacio con pequeños locales alineados uno al lado del otro, en donde se establecían los vendedores de frutas, carnes y verduras, eran espacios parecidos a las ferias de artesanos de hoy.
Algunos productos llegaban en barco desde muy lejos. Por eso eran caros: licores, muebles, abanicos, platos, copas de cristal, cubiertos, telas, vestidos, azúcar, café, chocolate.
También a las afueras de la ciudad se encontraban las pulperías de campo donde la gente se acercaba para comprar sus provisiones, jugar a las cartas, a la taba, tomar unos ricos mates o beber aguardiente. Allí también se podía comprar alimentos, ropas, tejidos y productos hechos en la colonia.
Muchas familias de escasos recursos tenían una empresa familiar que les alcanzaba para cubrir sus necesidades básicas, Algunas confeccionaban cigarros, tejidos y comidas típicas que vendían por las calles de la ciudad.
También existían los vendedores ambulantes, En la colonia desde muy temprano se podían escuchar a los vendedores ambulantes que recorrían la ciudad ofreciendo sus productos: velas, escobas, agua, leche, plumeros, etc.
El comercio ambulante estaba mayormente a cargo de la población de origen africano, que al ser esclavos eran obligados a trabajar y rendir toda la recaudación a sus amos.
Cada vendedor ambulante tenía su pregón anunciando sus productos.
ESCUCHEMOS ESTAS CANCIONES DE LOS VENDEDORES....
VENDO YO, VENDO YO, TODO LO QUE NECESITAN.... LLAMENME, SIEMPRE VOY POR ESTAS CALLECITAS...
¡¡A CANTAR!!
¡¡A DIVERTIRNOS VENDIENDO COMO EN 1810!!
¿QUE TAL SI NOS MANDAN VIDEITOS DE USTEDES VENDIENDO?
¡A DISFRUTAR!